miércoles, 15 de octubre del 2025

ZC/ Comunicación Digital.- 27 de octubre 2024/ La flor de cempasúchil, conocida como Tagetes erecta, es una flor de origen mexicano que ha tenido un papel central en la celebración del Día de Muertos, una de las tradiciones más significativas en México. Su nombre proviene del náhuatl cempoalxóchitl, que significa “flor de veinte pétalos”, aludiendo a su característica forma llena de pétalos en tonos intensos de amarillo y naranja.

Historia

La flor de cempasúchil ha sido utilizada desde la época prehispánica por culturas como los mexicas, quienes la consideraban una flor sagrada que representaba el sol y la vida, y era empleada en ceremonias religiosas para honrar a los muertos. En la cosmovisión indígena, se pensaba que su vibrante color y su aroma característico ayudaban a guiar a las almas de los difuntos hacia los altares o altares de ofrenda, marcando el camino con pétalos para que los espíritus pudieran regresar a visitar a sus seres queridos.

Significado

El cempasúchil simboliza la luz y la vida; en el Día de Muertos representa la conexión entre el mundo de los vivos y el de los muertos. Su color intenso, que se asocia con el sol, se cree que ilumina y calienta el camino de las almas que vienen de visita. Además, el aroma de esta flor ayuda a los espíritus a encontrar su camino. Por esta razón, en los altares de Día de Muertos, se colocan tanto en ramilletes como en caminos de pétalos que guían a los difuntos.

Esta tradición perdura como un recordatorio del vínculo eterno con los seres queridos, celebrando la memoria y el amor que trascienden más allá de la muerte.