Por Zuleika Cáceres
Siempre se ha hablado de la complejidad que representa buscar una candidatura independiente y los requisitos que esta conlleva. En Q. Roo, hemos visto como en elecciones pasadas los aspirantes terminan por rendirse al no cumplir con el mínimo de los apoyos y requerimientos establecidos por el Instituto Electoral de Q. Roo (IEQROO).
A nivel nacional no es distinto, apenas este domingo se dio a conocer que ninguno de los dos aspirantes presidenciales logró concretar el procedimiento, no alcanzaron los números que marca la ley. Es decir, 961 mil 405 apoyos ciudadanos, equivalentes a 1% de la lista nominal del país, en al menos 17 entidades federativas.
En los estados también ha dado de que hablar este método para dar “espacios” a los ciudadanos, pero sobresale la dificultad para recabar las firmas y el apoyo financiero a los aspirantes.
En este proceso y con base en el plazo establecido, Quintana Roo recibió nueve intenciones para candidaturas independientes para las presidencias municipales, así como dos para diputaciones locales.
A partir del 19 de enero y hasta el 17 de febrero, podrán pedir el respaldo ciudadano en busca de la candidatura y así poder participar en las campañas políticas rumbo al 2 de junio.
Para Ayuntamientos el respaldo será del 1.5% del padrón electoral de cada municipio; para Benito Juárez será de 10 mil 294 firmas; Solidaridad, tres mil 791; Felipe Carrillo Puerto, 900 y Othón P. Blanco dos mil 692.
Para el caso de diputaciones locales, en el Distrito 8, con cabecera en Cancún, el aspirante deberá reunir mil 752 firmas, mientras que el del Distrito 15, con cabecera Chetumal, requiere de mil 557.
Después viene un proceso de revisión por parte de la autoridad electoral, a fin de que las rúbricas sean auténticas y cumplan con la certeza y legalidad.
Pero no termina ahí, -en caso de pasar los primeros filtros-, los mecanismos se complican por la inequidad en el financiamiento de quien tiene el cobijo de un partido político y quien va únicamente como un ciudadano. Además, quienes van por la reelección tiene mucha más ventaja sobre cualquier otro contrincante aunque el discurso sea distinto.
Desde la apertura de espacios ciudadanos en las elecciones, especialistas y políticos han cuestionado los procedimientos, que lejos de ayudar impide llegar al objetivo.
Al final de la contienda, veremos si la democracia se refleja en las urnas o se rendirán antes del 2 de junio.
